El cáncer de mama en etapa 3, a menudo referido como cáncer de mama localmente avanzado, es una condición grave, pero no necesariamente equivale a una sentencia de muerte [1]. Con el tratamiento y cuidado adecuados, puede ser controlado, e incluso en algunos casos, curado [2].
La 'etapa' del cáncer es indicativa del tamaño del tumor y del grado en que se ha extendido dentro del cuerpo [3]. La etapa 3 significa que el cáncer se ha extendido más allá de la inmediata vecindad del tumor, posiblemente invadiendo los ganglios linfáticos y músculos cercanos, pero no ha alcanzado órganos distantes [4]. A pesar de que esta etapa es más desafiante de tratar que las etapas anteriores, no es una tarea imposible [5].
Las opciones de tratamiento abarcan cirugía para extirpar el tumor, radioterapia, quimioterapia, terapia hormonal, terapia dirigida, o una combinación de estas [6]. Su proveedor de atención médica sugerirá el plan de tratamiento más adecuado para usted, considerando las características específicas de su cáncer y su salud general [7].
La tasa de supervivencia a cinco años para el cáncer de mama en etapa 3 es aproximadamente del 72% [8]. Esta estadística implica que 72 de cada 100 individuos diagnosticados con cáncer de mama en etapa 3 siguen vivos cinco años después del diagnóstico [9]. Sin embargo, es crucial tener en cuenta que estas cifras son promedios, y las circunstancias de cada persona son únicas [10]. Numerosos factores pueden influir en su esperanza de vida, como su edad, salud general, su respuesta al tratamiento y las características específicas de su cáncer [11].