Sí, las alteraciones en la piel pueden ser indicativas de cáncer [1]. La piel, siendo el órgano más grande del cuerpo, no es inmune a los efectos del cáncer [2]. Existen varias formas de cáncer de piel, cada una presentando su propio conjunto único de signos y síntomas [3]. Sin embargo, cualquier alteración notable en la piel debe considerarse una posible señal de alerta y no debe pasarse por alto [4].
Los signos más frecuentemente observados de cáncer de piel incluyen la aparición de nuevos crecimientos, llagas que no cicatrizan, o alteraciones en los lunares existentes [5]. Por ejemplo, el melanoma, la forma más letal de cáncer de piel, a menudo se manifiesta como un lunar nuevo y de aspecto anormal o un cambio en un lunar existente [6]. La regla ABCDE es un mnemónico útil para recordar qué buscar: Asimetría, Borde irregular, Color que no es uniforme, Diámetro mayor de 6mm, y Evolución en tamaño, forma o color [7].
Sin embargo, es crucial tener en cuenta que no todas las alteraciones de la piel son cancerosas [10]. Muchas condiciones de la piel, alergias e irritaciones también pueden resultar en cambios en la piel [11]. Si observa cualquier cambio inusual en la piel, es aconsejable buscar el consejo de un profesional de la salud para un diagnóstico preciso [12]. La detección temprana y el tratamiento del cáncer de piel pueden mejorar significativamente el pronóstico [13].