Para los pacientes diagnosticados con cáncer de piel, es crucial tener en cuenta los tipos de maquillaje que utilizan [1]. No todos los productos de maquillaje son iguales, y algunos pueden contener ingredientes dañinos que podrían potencialmente exacerbar las condiciones de la piel [2]. Siempre se recomienda optar por productos hipoalergénicos, no comedogénicos y sin fragancia [3]. Estos son menos propensos a irritar la piel o causar reacciones alérgicas [4].
En cuanto a la base, elige opciones a base de minerales ya que son más suaves para la piel y proporcionan una barrera física contra los rayos dañinos del sol [5]. Evita productos con ingredientes como parabenos, ftalatos y fragancias sintéticas, que pueden irritar la piel sensible [6]. Además, algunos maquillajes contienen SPF, que puede proporcionar una capa extra de protección solar [7].
En términos de maquillaje de ojos, opta por productos que sean probados por oftalmólogos, especialmente si tienes ojos sensibles o usas lentes de contacto [8]. Evita la máscara de pestañas a prueba de agua, ya que requiere un removedor especial que puede ser duro para la piel alrededor de los ojos [9].
Por último, siempre recuerda remover tu maquillaje al final del día [10]. Dejar el maquillaje durante la noche puede obstruir los poros y provocar brotes [11]. Usa un removedor de maquillaje suave o agua micelar para limpiar tu piel sin causar irritación [12]. Y, por supuesto, siempre consulta con tu dermatólogo u oncólogo antes de hacer cualquier cambio en tu rutina de cuidado de la piel o maquillaje [13].