La recuperación después de una mastectomía, una operación quirúrgica que implica la eliminación de uno o ambos senos, varía de una persona a otra [1]. Típicamente, la fase inicial de recuperación dura aproximadamente de 2 a 3 semanas [2]. Durante este período, se pueden experimentar molestias, hinchazón y adormecimiento [3]. Estos síntomas se pueden controlar con la ayuda de medicamentos para el dolor y fisioterapia [4].
En la semana siguiente a la cirugía, es común sentir fatiga y dolor [5]. Es crucial descansar y evitar levantar objetos pesados [6]. Su médico proporcionará instrucciones detalladas sobre cómo cuidar la herida y cuándo reanudar las actividades regulares [7].
Para la segunda semana, los niveles de energía pueden comenzar a aumentar y el área quirúrgica comenzará a sanar [8]. Todavía puede haber algo de incomodidad, pero debería ser menos severa [9]. Los ejercicios suaves pueden ayudar a restaurar el movimiento y la fuerza en su brazo y hombro [10].
La recuperación a largo plazo implica adaptarse a los cambios en su cuerpo y manejar los aspectos emocionales de un diagnóstico y tratamiento de cáncer de mama [11]. Los grupos de apoyo, la consejería y la comunicación abierta con su equipo de atención médica pueden ser beneficiosos [12].
Es importante recordar que el viaje de recuperación de cada persona es único [13]. Está perfectamente bien tomarse su tiempo y escuchar a su cuerpo [14]. Las visitas regulares con su médico son cruciales para monitorear su progreso y abordar cualquier preocupación